Un pequeño gran recuerdo (El tamaño no importa)

Bruselas, capital de Europa, una ciudad belga que no aparenta serlo por que la mayoría de sus habitantes (alrededor de 1 millón) proceden de otros países. Mis compañeras de clase estuvieron este fin de semana allí y he aquí la existencia de este completísimo reportaje. Aunque no me han contado casi nada, creanme que me he tenido que enterar por lo que ponen en sus respectivos fotologs. No me cuentan nada, sin embargo dicen que se acordaron de mí. Y como nos acordamos mutuamente de nosotros, les dedico esta entrada.

Como recuerdo de su estancia, me trajeron (que no me tenéis que traer nada...) un Manneken-Pis. ¿Que qué es esho? Pues esho es sin duda el monumento más importante de Bruselas, hombre. Manneken-Pis es una estatua de un pequeño niño y es un monumento muy visitado y concurrido. Mucha gente al ver a Manneken-Pis les parece muy pequeño pero no todas las estatuas importantes tienen que ser grandes. (Ya sabéis lo que dicen, que el tamaño no importa, joder, lo que importa es joder, y además, que es sólo un niño, cómo queréis que sea. (Hablamos del tamaño del Manneken-Pis.) Y también se dice que joder no joderemos, pero joder las ganas que tenemos. Aplausos.)

Volviendo a lo que de verdad importa (todos sabemos que no es el tamaño), el origen de la famosa estatua de Manneken-Pis se remonta a 1619, Jerome Duquesnoy fue el escultor que la creo a base de bronce. Durante todos estos siglos ha sido robada y ocultada para no ser bombardeada en las guerras (por tanto, tiene un material a base de bombas). En 1698 el Gobernador de los Países Bajos Austriacos regalo un traje a Manneken como motivo de la celebración de una festividad de un gremio de la ciudad. Esto hizo que mucha gente después le regalara muchos más trajes hasta llegar a más de seiscientos. Que se pueden visitar en un museo. Aunque como mejor se aprecian las cualidades del nene es como Dios lo trajo al mundo. En pelota picá, qué coño! (digo.. qué pito!) En definitiva, qué bárbarooo!!